El Dique Seco de Salina Cruz, toda una historia
Salina Cruz. Desde hace 50 años, el Astillero de Marina número 20 del Puerto, se ha consolidado como uno de los más importantes en el País en la reparación, mantenimiento y construcción naval.
El auge en los años 70s y 80s que tuvo el Dique Seco como es conocido fue tan importante que embarcaciones de España, Francia, Inglaterra, así como aquellos mercantes ingresaban a mantenimiento por contar no solo con el personal capacitado y reconocido, sino por la infraestructura.
Aunque en los últimos diez años, ha tenido un declive, eso no ha significado que siga siendo uno de los astilleros importantes después de Altamira, Lázaro, Coatzacoalcos, Tampico, Topolobambo, Acapulco en cuanto a las actividades marítimas que realiza.
Hombres y mujeres que han dejado parte de su vida, trabajando en las áreas de soldadura, pailería, herrero, tuberos, argoneros, torneros, electricistas, quienes han construido un sin número de embarcaciones.
Estos obreros especialistas civiles les han enseñado a los marinos militares que han sido contratados para desempeñar diversas actividades al interior de ese recinto.
Sin duda, el Astillero de Marina, no solo se percibe el olor a grasa, de la soldadura, sino también se recitan un sinfín de sobrenombres que han sido parte de la historia de esta industria naval.
Desde el murciélago, la bestia, el sindi, la araña, tobón, mata paloma, son solo algunos de los innumerables sobrenombres con que se identifican entre civiles y militares al interior del Astillero de Marina de Salina Cruz.
Don José del Carmen quien durante 20 años trabajó en el Dique Seco, expresó que hubieron años de gloria, cuando el Astillero había trabajo en “cantidad”, que era difícil darse abasto, pues aseguró que ni bien terminaban de arreglar un barco y otro más ya está en el muelle en espera de poder ingresar para su mantenimiento.
“En el dique llegaban todo tipo de barcos, desde el más pequeño hasta el más grande, solo los civiles eran los que trabajaban en las diferentes áreas y eran pocos los marinos que ayudaban y a la vez aprendían”, expresó.
Hoy, aseguró “de eso ya nada queda, ahora los civiles fueron desplazados, contratan a puro marino, que no tiene la preparación, solo aprendieron a puntear y ya se creen grandes soldadores”.
Y añade “ya no hay personal calificado y capacitado, solo algunos que si le pusieron empeño, aprendieron el oficio, los demás solo de dedicaban a cumplir para poder ganarse unos centavos”.
Reconoció que el Dique Seco es el más seguro de todos los Astilleros que hay en el país, al sostener que “ninguno cuenta con cimientos fuertes que fueron construidos por los ingleses, donde también muchos hombres dejaron parte de su vida”.
Asimismo, aseguró que hay Astillero para más años, pero también tienen que modernizarse con equipos sofisticados y desechar esas grúas viejas y algunos otros equipos que ya cumplieron con su ciclo de utilidad.